El Senado aprobó anoche por unanimidad el proyecto sobre Educación Ambiental Integral, que establece la incorporación de contenidos ambientales en los diversos niveles educativos y busca sentar una política de Estado transversal alrededor de la concientización sobre el cuidado del ambiente.
El proyecto ya contaba desde marzo con media sanción de la Cámara de Diputados y ayer fue ratificado por la Cámara Alta con el voto afirmativo de los 58 legisladores. El texto pretende que los estudiantes puedan adoptar un enfoque que permita comprender la interdependencia de todos los elementos que conforman e interactúan en el ambiente; el respeto y valor de la biodiversidad; la equidad; el reconocimiento de la diversidad cultural; el cuidado del patrimonio natural y cultural; y el ejercicio del derecho a un ambiente sano.
“Construir una Argentina Sostenible requiere de un enorme cambio cultural, la forma más efectiva de lograrlo es a través de la educación. Espero que luego de la sanción de esta ley, el Poder Ejecutivo haga una convocatoria amplia y honesta donde no solo la academia, sino también el sector productivo y las organizaciones de las sociedad civil, especialmente los jóvenes, estén sentados en la misma mesa elaborando los contenidos y las estrategias”, expresó Gladys González, senadora por la provincia de Buenos Aires y presidenta de la Comisión de Ambiente.
La estrategia Nacional de Educación Ambiental se hará operativa por medio de la articulación interministerial, interjurisdiccional e intersectorial permanente, a través de la creación de una Coordinación Ejecutiva de la Estrategia Nacional de Educación Ambiental (CENEA), que será a la vez asistida por un Consejo Consultivo.
La misma estará integrada por representantes del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Nación, del Ministerio de Educación de la Nación, del COFEMA y del Consejo Federal de Educación (CFE), y su conformación deberá atender a la paridad de género.
Además, el Consejo Consultivo contará con representantes de pueblos originarios, organizaciones gremiales docentes de la educación pública, privada y técnica con reconocimiento nacional, sector estudiantil y juvenil, representantes del sector científico, representantes de universidades nacionales, provinciales y privadas, representantes de guardaparques del sector público y privado, y organizaciones de la sociedad civil con interés en la educación y el compromiso ambiental, entre otros.
La iniciativa crea la Estrategia Nacional de Educación Ambiental Integral (ENEAI) y de las Estrategias Jurisdiccionales de Educación Ambiental Integral (EJEAI). Estas tienen el deber de elaborar y diseñar políticas nacionales y orientar políticas jurisdiccionales, estrategias y acciones de educación ambiental integral; alcanzar la más amplia cobertura territorial, social y sectorial a nivel nacional y generar consensos sociales sobre los cuales establecer acuerdos temáticos y prioridades.
Además establece que cada jurisdicción deberá promover una acción comunitaria en la que se fomente el «Compromiso Ambiental Intergeneracional» en el cual las personas tengan la oportunidad de establecer un pacto de responsabilidad con el ambiente y las generaciones sucesivas.
Cada jurisdicción dispondrá la modalidad de implementación en la agenda educativa de al menos una jomada o espacio de mejora institucional dedicada a la educación ambiental y dará debida difusión sobre la actividad y sus participantes, así como la entrega de las correspondientes menciones por la participación.
Máximo Mazzocco, fundador de Eco House Global y miembro de Alianza por el Clima, sostuvo: “Estamos eufóricos y muy entusiasmados. Faltan más leyes, pero la LEA es una de las primeras que deberíamos haber sancionado después de la reforma constitucional de 1994. La Educación para la Sostenibilidad es el puntapié inicial de la revolución social, ambiental y económica que necesitamos. Los parches ciegos, sin visión, ya no sirven. Vamos por un cambio estructural, masivo, que amerita un nuevo contrato social”.